Cuando paseamos con nuestros perros por el parque por el campo o cualquier otro lugar tenemos que fijar una distancia de seguridad para que el paseo sea seguro.
Es obvio que si paseamos con la correa, no tenemos problemas con la distancia de seguridad ya que nos la marca la correa. Dependiendo la comunidad en la que vivamos la ley marcara el largo de la correa que podemos utilizar en las diferentes razas de perros ( los considerados PPP necesitan una corea por lo general más corta de lo normal) siendo por regla general una correa no más larga de 3 metros.
Pero cuando soltamos al perro en los pipicanes o en los parques en los horarios marcados para ello, nuestros perros deben mantener una distancia de seguridad para evitar posibles problemas o accidentes.A nuestro parecer una distancia de seguridad correcta es la que permite al perro explorar el entorno sin riesgos. Para ello debemos de tener siempre a la vista a nuestro perro y poder controlarlo.
Tenemos que tener en cuenta que cuanta más distancia hay entre el perro y nosotros, más difícil es que el perro atienda e nuestras peticiones. Por ello es muy importante que por lo menos tenga una llamada fiable, ya que en muchas ocasiones evitaremos numerosos problemas.
Para conseguir una distancia de seguridad correcta, podemos practicar diferentes ejercicios.
Para comenzar buscaremos un lugar lo más tranquilo posible y con el menor número de distracciones. Si podemos buscar un lugar en el tengamos limitaciones a los laterales, será perfecto para iniciar el ejercicio, ya que el perro solo tendrá dos opciones: o caminar hacia nosotros o alejarse de nosotros, no pudiendo caminar en paralelo a nosotros con una gran distancia.
Para ello empezaremos a caminar, y cuando veamos que nuestro perro se adelanta nos daremos la vuelta y comenzaremos a caminar en la otra dirección. En las primeras ocasiones puede que el perro no se dé cuenta de que nos hemos dada la vuelta y puede que coja mucha distancia, para ello podemos darle una señal para indicarle que hemos cambiado de dirección.
Cuando el perro se dé la vuelta y venga hacia nosotros realizaremos los mismos pasos, una vez que nos sobrepase cambiaremos de nuevo de dirección.
Según vallamos practicando, podemos dejar de utilizar la señal que indica a nuestro perro que hemos cambiado de dirección, ya que seguramente el perro empiece a entender lo que queremos y este más pendiente de nosotros, cambiando el mismo la dirección sin tener que avisárselo.
Una vez empiece a entender el ejercicio, empezaremos a introducir nuevos criterios para que el perro empiece a realizarlo en diferentes entornos y con diferentes distracciones.
Si al iniciar el ejercicio vemos que nos cuesta mucho, podemos utilizar una correa larga (mínimo unos 10m) para indicar a nuestro perro cuando cambiamos el sentido de la marcha.
Esperamos que os haya gustado el articulo y os sea de ayuda.
Muy buen artículo. Hay que tener en cuenta la distancia de seguridad, sobre todo en perros escapistas o demasiado curiosos que luego desaparecen o aparecen habiendo hecho alguna trastada
Esta claro que cada perro tendrá una distancia de seguridad distinta, dependiendo de su carácter y personalidad. Pero si veo fundamental que la distancia tiene que ser la que nos permita mantener contacto visual con el perro y que responda a la llamada cuando lo necesitemos. Gracias por tu comentario
La distancia de seguridad debiera ser regulada ya que hay mucho inconsciente que se te acerca a acariciar el perro sin consultar, ni conocer al perro.
Por lo que lo que suelen decir a pesar de ser ellos los que vienen a ti ,es si me muerde la culpa es tuya.
Realmente mía de que ya que yo estoy guardando la distancia de seguridad.
Muchos partidos animalistas ,pero no se lo que hacen.